Nuestro nuevo tomógrafo computado GE Revolution Máxima realiza estudios de alta complejidad con máxima resolución diagnóstica. Tal es el caso de la angiotomografía computada del cerebro y vasos de cuello que permite obtener imágenes tridimensionales de alta resolución de las estructuras vasculares en estas áreas. La rapidez de adquisición del nuevo equipo elimina la superposición de imágenes venosas, tal como sucede en equipos con menor fila de detectores y que disminuye notablemente los artefactos por movimientos involuntarios del paciente.
La Angiotomografía es una técnica de imágenes médicas de avanzada que se utiliza para evaluar de manera detallada la circulación sanguínea en el cerebro y en las arterias del cuello. A medida que la TC toma imágenes transversales del cerebro y el cuello, se generan reconstrucciones tridimensionales que permiten a los radiólogos evaluar la presencia de obstrucciones, aneurismas, malformaciones arteriovenosas o cualquier otra anormalidad vascular que pueda estar comprometiendo el flujo sanguíneo hacia el cerebro.
Esta técnica es de vital importancia en el diagnóstico y el seguimiento de enfermedades cerebrovasculares, como los accidentes cerebrovasculares (trombosis, embolias), la enfermedad de los vasos sanguíneos (aterosclerosis), así como en la detección de aneurismas cerebrales. Es una herramienta valiosa que puede ser fundamental en la planificación de tratamientos como la angioplastia, la colocación de stents o la cirugía. Además, al ser menos invasiva que otros procedimientos, como la angiografía convencional, conlleva menos riesgos para el paciente y ofrece resultados en tiempo real, lo que facilita una respuesta rápida y precisa en situaciones de emergencia cerebrovascular.